El Azúcar de Guatemala implementa medidas sostenibles para mantener la salud de los suelos
Desde 2014, cada 5 de diciembre, se celebra el Día Mundial del Suelo fecha propuesta por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura -FAO-. Este año se enfoca en “Los suelos, origen de los alimentos” con el objetivo de concienciar sobre la importancia de los suelos para una producción alimentaria, a la vez que se pide un manejo sostenible que garantice la salud de los suelos.
De acuerdo con el libro “El cultivo de la caña de azúcar en Guatemala” de Cengicaña, las plantas, como la caña de azúcar, requieren para su crecimiento y desarrollo de 16 elementos denominados esenciales. El carbono, hidrógeno y oxígeno provienen del agua y del aire; los otros 13 nutrientes son minerales que los obtiene del suelo o son adicionados como los abonos.
Prácticas enfocadas a la conservación de suelo
El gestionar los suelos de forma sostenible ha sido clave para la producción de azúcar en Guatemala. Los ingenios azucareros realizan un conjunto de prácticas enfocadas a la conservación de suelo y agua entre ellas: uso de abonos verdes, semilleros en fajas, diseño de áreas con estructuras de conservación de suelo y agua (acequias, curvas a nivel y pozos de infiltración), disminución de pasos de maquinaria y siembra de primer tercio.
Este conjunto de actividades, enfocadas a la conservación de suelo y agua, contribuyen en:
- Disminución de uso de abonos químicos.
- Aumento de la materia orgánica, que significa mejora de la estructura del suelo, retención de humedad y biodiversidad del suelo.
- Leve aumento del rendimiento en la producción de azúcar.
- Reducción de la erosión hídrica y escorrentía superficial lo que optimiza la infiltración de agua que alimenta el manto freático.